miércoles, 19 de septiembre de 2012

Reseña: El gato negro, de Edgar Allan Poe


                                   Titulo: El gato negro
                                   Autor: Edgar Allan Poe
                                   Año de publicación: 1943

El gato negro fue el primer cuento que leí de Poe. Me dejó impactado, ya que fue allá por mi adolescencia, a los doce o trece años. Desde entonces acostumbro leerlo de vez en cuando, y cada vez lo encuentro más extraordinario, aunque no es precisamente muy de mi gusto la literatura de terror, pero con Poe se pueden hacer algunas excepciones.
La historia nos lleva a conocer a un joven recién casado y de aparentes nobles sentimientos, que siente un profundo cariño por los animales y posee varias mascotas, entre ellas un gato negro, a las que trata con profundo afecto. Pero el vicio del alcoholismo se apodera de él y su personalidad cambia drásticamente.
El protagonista empieza a sentir placer al torturar a sus animales, menos, al principio, a su gato, al que lo une un gran afecto, pero al poco tiempo ya tampoco a éste discrimina. Llega al extremo de sacar un ojo al animal y días más tarde, cuando ya había sanado, de ahorcarlo por el simple placer de verlo morir.
Después del vil ahorcamiento, varios sucesos anormales empiezan a ocurrirle, como el incendio de su casa, de cuya estructura sólo se mantiene en pie un muro que, de manera increíble, tiene la extraña silueta de un gato ahorcado dibujada.
Tras estos acontecimientos la personalidad del protagonista continua evolucionando, llega a sentir remordimientos por su crimen y a buscar a un nuevo gato, al que encuentra de manera extraña, como una especie de aparición, y más extraño aún es que le falta un ojo y tiene un circulo blanco en el cuello, como si allí algo, posiblemente una soga, hubiera hecho mucha presión, tanta que el pelaje negro del animal dejó de existir para dar cabida a uno blanco.
Poco después de adquirir a su nueva mascota, el hombre vive atormentado y con miedo a su gato, recordando quizás las palabras que alguna vez le dijo su mujer: que las brujas habitan en los gatos negros. El desenlace es aterrador, como tendría que serlo un cuento de Poe, el escritor que puso de moda las historias de terror en lengua inglesa.

4 comentarios:

  1. No sentia placer al torturarlos, sentia era rabia y odio contra ellos.
    Y la mancha blanca era en el abdomen/panza y tenia la forma de la marca de la muerte o una guillotina si mal no me acuerdo.
    Segun la editorial q lei, pero esta bien me gusta

    ResponderEliminar
  2. Comparto con vosotros un audiolibro de El gato negro, de Edgar Allan Poe.

    Espero que os sirva de ayuda, especialmente a todos aquellos que tengan dificultades para leer.

    https://audiolibrosencastellano.com/cuento/audiolibro-completo-gato-negro-edgar-allan-poe-1843

    Un saludo :)

    ResponderEliminar
  3. Buenas. Ante todo, enhorabuena por la reseña. He leído casi todo de Poe, y este relato me fascinó en su momento pero no he podido releerlo, sin duda porque el personaje principal tortura al gato que es el eje de todo. No soy capaz de leer textos donde se maltrate a los animales. Sin embargo, no dejo de reconocer que es una obra magistral que combina terror psicológico y hechos reales en la propia mente del autor. Como digo, merece al menos una lectura reposada. Una obra maestra sin duda. Salu2.

    ResponderEliminar